En busca de relaciones al 100%
Miguel Ángel Jesús Suarez es formador de coaches, reside en General Roca, provincia de La Pampa. Se define como un amante de la naturaleza.
Su misión como coach es formar líderes y coaches ontológicos, buscando añadir valor a sus vidas a través de enfocarse en el servicio.
Conversamos acerca de su propuesta para nuestro próximo 100% Coaching Ontológico, 100% AACOP a realizarse el jueves 12 de noviembre, 19:00 Hs.
¿Qué te motivo a participar del 100% Coaching Ontológico, 100% AACOP?
Me parece muy oportuno y generativo crear nuevas realidades. Este proyecto permite seguir difundiendo la profesión desde AACOP, brindándonos visibilidad con las personas y mostrando cómo el coaching ontológico impacta positivamente en las personas, tal cual lo hizo con la mía.
Ser un voluntario de la AACOP es para mí un gozo y, agradezco poder aportar un granito de arena para este proyecto.
¿Qué expectativas tenés en relación a esta iniciativa que acerca el coaching a la sociedad?
Primero que conozcan algunos aspectos particulares de nuestro estilo de vida, de estar parado en el mundo de una manera particular. Luego que puedan tomar contacto con algunas competencias y capacidades del coaching ontológico que hacen al vivir del ser humano. De alguna manera despertar el hambre del ser de las personas.
¿Cuál es el tema que vas a abordar en el encuentro?
El tema ronda alrededor de las relaciones, de hecho su nombre es “Vivir al 100% tus relaciones”, dado que esta propuesta en este tiempo que vivimos, merece una atención particular. Que nos detengamos a reflexionar y definir ajustadamente que se nos presenta en una relación. Primero la relación conmigo mismo que es todo un desafío y una gran pregunta. Nos hemos especializado tanto en el hacer, que nosotros no estamos incluidos en el juego. Nos relacionamos con el mundo sin privilegiarnos, inclusive sin llegar a saber quiénes somos o quiénes queremos ser.
Por otro lado las relaciones con otros, y particularmente desde esta perspectiva del coaching ontológico constructivista y sistémico –dado que somos sistemas complejos-, todo esto merece una consideración de cómo entendemos las relaciones.
Muchas veces creemos que las relaciones somos (vos-yo) en una relación particular de quienes somos o cómo somos. La relación es una configuración aparte de nosotros que debe ser atendida como una unidad. Propone por un lado a los seres humanos que definamos cuáles son las expectativas y necesidades de nuestras relaciones y por otro, que diseñemos qué tipo de relaciones queremos tener con el otro y quiénes ser nosotros en esas relaciones.
Esto ha sido para mí un aprendizaje, por un lado maravilloso pero por otro duro debido a que, yo creía que las relaciones eran como las pensaba o que las personas se avenían o no a mí, con mi medida de porcentaje de compatibilidad de relaciones. Si bien es cierto que podemos tener más afinidad con unas personas más que otras, el desafío de construir relaciones es algo que todavía nos debemos los seres humanos y de saber cómo hacerlo o tener algunas orientaciones, inclusive desde la capacidad de tener con qué responder. ¿Qué requiere de mí una relación? ¿Y qué requiere del otro? Esto es importante que lo caminemos.
¿Qué es lo que te motivó a elegir esta temática?
Para empezar decirte que muchas heridas de relaciones no bien vividas que me motivaron a aprender a relacionarme de otra manera. Cuando empecé a aprender la construcción de un concepto de relación fuera de mí y como un espacio sagrado de mucho respeto y construcción, comencé a construirme en la relación conmigo mismo. La verdad que antes no sabía cómo relacionarme conmigo. Después fui a recuperar relaciones perdidas y muy cercanas con mi madre, hermanos, hijos. Relaciones que por no saber cómo llevarlas, fueron rotas o destruidas.
Poco a poco me propuse reconstruir estas relaciones desde esta nueva perspectiva, desde un espacio común, acordado y responsable. Hoy que recuperé esas relaciones que me importaba y consideraba valiosas. También me tocó declararme incompetente con algunas relaciones porque no había acuerdo para construir juntos.
Hoy soy yo en las relaciones, soy genuino, elijo quien soy, no necesito ocultar ni privarme de nada. Vivo las relaciones en forma real. Me permito enojarme y mostrarlo, entristecerme y contarlo. Mostrar mis emociones y no negarlas porque considero que la vulnerabilidad es una fortaleza y no una debilidad.
¿Cómo abordás esta temática desde el coaching ontológico?
Quisiera dividirlo en dos partes. Primero al decir de Kierkegaard “somos seres existenciales”, no somos seres definidos ni acabados. Desde ahí me doy el espacio de libertad de poder construir-me, de poder elegir-me y de poder elegir quién quiero estar siendo permanentemente y que muy amorosa y poderosamente el coaching nos invita. Devenir un siendo responsable.
Por otro lado la distinción que existe entre una relación y un vínculo donde este nos ata, nos une de alguna manera u otra y que puede ser simbólica o literal. Por ejemplo un padre y un hijo que están unidos por un vínculo no necesariamente están construyendo una relación. Considero que hay una gran diferencia entre el vínculo y una relación y por eso el coaching ontológico nos invita desde su perspectiva sistémica a considerarnos seres existenciales, no acabados y a dialógicamente, aprender con el otro. Entonces la relación con el otro, es un aprendizaje constante en cómo queremos ser en esa relación y cómo esto impacta desde el coaching que nos invita a ser libres, elegir, pero hacernos responsables de nuestros actos y sus consecuencias.
¿Qué pensás que vas a aportar a los asistentes?
Verse como posibilidad para las relaciones. Los humanos caminamos a veces entre bambalinas en los extremos. Una persona puede decir “soy tímida” y las relaciones me cuestan, otra soy frontal y digo lo que pienso y no me importa lo que pueda pensar el otro, no digo las cosas porque temo herir. Esto hace a la integridad del ser humano que aprende socialmente, que vive y convive con el otro, necesitando imperiosamente aprender el cómo compartir, convivir y socializar.
¿Cuáles son tus palabras de cierre y tu invitación para este 100% Coaching Ontológico 100% AACOP?
Que nos demos el permiso y la posibilidad a escribir nuestro propio “relato”. Nuestra película con el otro y conmigo mismo. Que no me conforme la película que otros escribieron para mí: mi padre, mi madre, mi jefe, mi maestro. Yo puedo como protagonista ahora “reescribir” mi propio “relato” conmigo, con mi pareja, con mis hijos.
Quiero invitarte a que te animes a ocupar un espacio en esta propuesta que te hace la AACOP para hablar sincera, amorosa y responsablemente de quién soy yo, y quién sos vos, cuando nos relacionamos para saber y crear conciencia de que podemos construir una relación significativa y liviana que nos convoque a una mejor vida.
“En busca de relaciones al 100%” – Jueves 12 de noviembre de 2020, 19:00 Hs
Inscribite en: https://forms.gle/L3Cf6GoZWh3MgtZ18
Consultas: mk@aacop.org.ar